CTA
Con una dura postura frente al Gobierno, la CTA le reclamó a la CGT mantener la lucha
Yasky y Micheli le exigieron a Macri que cambie el modelo económico; llamaron a la central obrera a formar un frente común y anunciaron una nueva marcha federal después del paro
"Unidad de los trabajadores, unidad en la acción y..." La frase con la que Hugo Yasky, secretario general de la CTA Argentina, comenzó su discurso quedó trunca. Cohetes y bombos rugían en el fondo de la Plaza de Mayo, tapando sus palabras. Enseguida comenzó un cántico que se extendió por todo el lugar: "Vamos a volver, a volver, vamos a volver", en referencia al gobierno de Cristina Kirchner. Yasky retomó: "Éstos son los signos y emblemas que nos representan. Nos unen los mismos principios y las mismas convicciones a las dos CTA y la CGT. El pueblo dice basta de ajuste, basta de atropello y de hambre". Otra vez interrupción: "Luche CTA, luche CTA". Desde arriba del escenario, Yasky le agregó una pequeña y nada sutil modificación: "Luche CGT".
En toda esa escena se delinearon los dos conceptos que encabezaron la jornada de movilización que ambas CTA convocaron ayer: un duro discurso "anti-Gobierno" y varios guiños a favor de un frente común de lucha con la CGT.
La marcha de las dos CTA fue convocada antes de que la CGT fijara la fecha del paro del 6 de abril y luego se mantuvo. Si bien los datos de los organizadores aseguraban que hubo 150.000 personas, algunos manchones vacíos en la plaza daban la imagen de un número inferior. Participaron diferentes agrupaciones, como Nuevo Encuentro, Tupac Amaru, los movimientos sociales Barrios de Pie, Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Quebracho, Miles y otros.
Alrededor de las 17, el escenario instalado de espaldas a la Casa Rosada comenzó a nutrirse de dirigentes. Además de Yasky y de Pablo Micheli, cabeza de la CTA Autónoma, estaban el líder de Suteba, Roberto Baradel; la titular de Ctera, Sonia Alesso; Daniel Catalano, secretario general de ATE capital; el dirigente de Miles Luis D'Elía; el representante de los porteros, Víctor Santamaría, y Francisco "Barba" Gutiérrez, secretario de Interior de la CGT y dirigente de la UOM. En la pantalla que iba proyectando imágenes de la plaza se leían las tres consignas centrales de la convocatoria: "Por el trabajo, la educación y paritarias libres".
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El primer discurso fue el de Micheli, quien remarcó en todo momento la importancia de "salir a la calle". Sin embargo, insistió en que la intención no es "desestabilizar", sino "hacer caer" el modelo económico del Gobierno. También se sumó al reclamo de construir una "unidad sindical".
"Pueblo que no está en la calle no tiene destino, no tiene posibilidad de transformar la realidad y vivir dignamente. Hoy, que hay un gobierno neoliberal, es doblemente importante estar en la calle."
Luego fue el turno del "Barba" Gutiérrez y finalmente Yasky cerró la jornada. Dedicó una importante parte de su discurso al conflicto docente y remarcó la "honestidad e integridad" de Baradel, quien lloró de emoción ante esas palabras.
Para cerrar, fijó una dura posición y un "plan de lucha" contra el Gobierno. "Después del paro [del 6 de abril de la CGT] no va a venir el remanso. El paro nos pone de pie, más aguerridos y fuertes para demostrar que hasta que se vaya el ajuste la lucha sigue", exclamó Yasky.
Adelantó, además, una nueva edición de la marcha federal que hicieron el año pasado, lo que implicará 40 días de movilizaciones a lo largo de todo el país.
Viernes, 31 de marzo de 2017
