ELIMINATORIAS RUSIA 2018
Argentina no fue efectivo y Brasil se llevó su premio
Tras un gran primer tiempo en el que fue muy superior y ganaba por el gol de Lavezzi (rompió con la sequía de 341 minutos), la Selección bajó su nivel y sufrió la igualdad 1-1 por parte de Lucas Lima.

A partir de ahí, la Verdeamarelha de Neymar creció y llevó a la desesperación de un conjunto albiceleste que terminó cometiendo muchos errores.
El equipo del cuestionado Martino sigue sin poder ganar y acumula dos puntos en tres presentaciones. Dirigió el paraguayo Arias, quien expulsó correctamente a David Luiz.
La Selección no supo aprovechar un muy buen primer tiempo y se quedó con las ganas en el clásico sudamericano con Brasil en el Monumental. El equipo de Gerardo Martino no pasó del empate 1-1 y acumuló su tercer partido sin ganar en el comienzo de las Eliminatorias. En Barranquilla, el próximo martes, deberá enfrentar a Colombia en busca de la recuperación camino al Mundial de Rusia 2018.
Si de alguna manera tenía que responder la Selección después de un fallido comienzo de Eliminatorias, esa manera era como lo hizo en el primer tiempo del partido que todos quieren ganar. Porque jugó esa primera parte como su DT lo espera. Conservó la idea, pero cambió las formas. Encontró el juego que había perdido en los choques con Ecuador y Paraguay y lo hizo con un conductor que hasta ahora no había aparecido. Angel Di María se puso la 10 de Messi y actuó como la camiseta lo exige.
Pero Argentina sería más que Fideo en esos primeros 45 minutos. Martino apostó por un Ezequiel Lavezzi resistido y el Pocho rindió jugando por la izquierda y llegando al gol. También lo hizo con un Gonzalo Higuaín que pocos querían volver a ver después de los goles errados en las finales del Mundial y de la Copa América. Y el Pipa lo entendió. Y aunque no mojó, se vistió de asistidor.
Los de atrás, tan bien o mejor que los de adelante. Porque aunque los lujos y el traslado los ponía Di María partiendo casi siempre de la derecha al centro, muchas veces la jugada nacía en los pies de Ever Banega, que en su función del triple cinco que puso el Tata sobresalía con marca y especialmente con juego. De hecho, por él nacería la jugada del 1-0. A los 33 minutos, le robó la pelota a Lucas Lima en la mitad de la cancha, tocó para Di María y el gol empezó a tomar forma. El rosarino vio picar a Higuaín, lo mandó un pelotazo por la derecha y el Pipa quedó muy bien perfilado para mandar el centro. Lavezzi, que venía corriendo de atrás, entró por el lugar indicado y empujó la pelota para desatar la alegría.
El empate apagó a la Argentina y tranquilizó a Brasil, que se animó a más. El orden, el fútbol y la presión en la mitad de la cancha desaparecieron. Di María dejó de gravitar y todo lo hecho en un primer tiempo perfecto, se fue esfumando con el correr de los minutos. Recién cuando la visita se conformó con llevarse un punto apareció nuevamente el equipo. Pero lo hizo tarde. El partido que pintaba para poner en un cuadrito, arrojaría finalmente un cuadro preocupante para el futuro.
El balance terminó siendo negativo. Cuando estaba todo dado para enderezar el rumbo, Argentina acumuló otro partido sin ganar en una eliminatoria exigente, en la que no se puede dar tantos pasos en falso.
Viernes, 13 de noviembre de 2015