EN LA ESCUELA LELOIR DE CORRIENTES
Denuncias cruzadas y un virulento piquete estudiantil por los apagones
Aseguran que no hay ventiladores ni bebederos y hay cortes de luz a diario. No les permiten dar clases en la galería ni llevar termolares.El problema de infraestructura en la escuela secundaria Federico Leloir no es nuevo. El establecimiento, ubicado en las Mil Viviendas, que lleva el nombre del científico argentino que obtuvo el premio Nobel de Química, arrastra un déficit en las instalaciones eléctricas, ahora se agudizó con los repetidos cortes de energía.

Sin ventiladores y con pocas bocas de servicio de agua potable, los alumnos se quejan porque sufren el calor y no les permiten hacer uso de alternativas que suenan lógicas: llevar recipientes con agua o dar clases fuera de los salones, en lugares más ventilados.
La negativa de las autoridades tiene sus razones. Dicen que en los termolares no ingresan agua sino otro tipo de bebidas y que fuera de las aulas son incontrolables. Ayer a la siesta se vio un poco de esto último. Los chicos abandonaron las clases -literalmente se hicieron “la rata”- para organizar un piquete frente a la escuela.
Pasada las 13.30 cortaron el tránsito en avenida La Paz y quemaron gomas mientras entonaban cánticos contra la dirección del establecimiento. El enojo se debe a que la directora del establecimiento, Mónica Maciel -según comentaron los alumnos-, comenzó a amonestar a todos los que llevaran termolares e incluso a los que ante el malestar comenzaron a convocar a la manifestación.
“Lo único que queremos es dar clases en mejores condiciones, durante la siesta se corta la luz y no nos dejan salir”, resaltó Melina, estudiante del quinto año.
“Hay compañeros que se descomponen del calor, estamos cansados de esto, por eso decidimos hacer manifestaciones frente a la escuela, para que hagan algo al respecto, porque no somos animales y también tenemos derechos”, detalló Facundo, también alumno del quinto año.
Con el calor que emanaba el fuego de las cubiertas y la bronca de los estudiantes, el piquete fue subiendo de temperatura. Se produjeron algunas refriegas con los automovilistas y también con un par de motociclistas que fueron “invitados” con escasa amabilidad a dar marcha atrás.
Al final tuvo que intervenir la Policía, llegó con un mediador y efectivos de la Policía de Alto Riesgo que logró disipar la protesta y reestablecer la calma. Sin embargo, el problema de fondo continúa. Las autoridades se negaron a recibir a NORTE de Corrientes.
Sábado, 1 de noviembre de 2014