CAMINO DE LA RECONSTRUCCIÓN
Del descenso al alivio, Independiente recuperó su lugar de privilegio
Todavía se derraman algunas lágrimas por la derrota 1-0 ante San Lorenzo del 15 de junio de 2013, que sentenció la suerte del "Rojo" y en consecuencia su ida a la Segunda División por primera vez.
Tras el desempate con Huracán, los dirigidos por De Felippe pusieron la historia en su lugar. En el medio, Miguel Ángel Brindisi, Javier Cantero, una pobre campaña y muchos inconvenientes políticos.
Tardó menos de un año, pero se sintió como una eternidad. Aunque todavía Avellaneda lamenta la derrota ante San Lorenzo y el primer descenso en la historia de uno de los clubes más populares del país, los grandes nunca dejan de ser grandes. Sufrió. Tuvo que llegar hasta un desempate ante Huracán. Pero... ¡Volvió!
Más allá de las dificultades deportivas que comenzaron con Miguel Ángel Brindisi y continuaron bajo la gestión de Omar De Felippe, las principales "piedras" en el camino para el "Rojo" fueron de la mano con la alborotada realidad institucional, que finalmente se cobró la "cabeza" de Javier Cantero. Basado en la experiencia de sus referentes, el carácter que inculcó su entrenador y el mandato de su trayectoria, el "Diablo" dejó la pesadilla en el olvido y apunta a "volver a ser" en el futuro inmediato.
EL PEOR CASTIGO FUTBOLÍSTICO: EL DESCENSO
Aquel 15 de junio de 2013 será imposible de olvidar para cada uno de los hinchas de Independiente. Si bien la pérdida de la categoría se produjo con la caída ante el "Ciclón", las razones se fueron sucediendo muchísimo tiempo antes. El club pagó la mala gestión de Julio Comparada, el descalabro económico, una errónea política de contrataciones y tampoco revirtió la situación cuando Javier Cantero asumió el mando como máxima autoridad (de los tres años que comprende el promedio de la discordia, un año y medio corresponde a cada mandatario).
La acumulación de 43, 47 y 39 unidades fueron los desencadenantes de una mancha que nunca podrá borrarse del libro de la historia, donde en páginas anteriores se escribieron capítulos gloriosos con 16 consagraciones internacionales y 14 del ámbito doméstico. Fueron los secuelas de una campaña que "tumbó" la espalda ancha de Américo Rubén Gallego, que había sido campeón en 2002, y también "cacheteó" a Miguel Ángel Brindisi, quien no pudo torcer un destino inexorable.
LA CAMPAÑA HACIA EL REGRESO A LA MÁXIMA DIVISIONAL
No resultó nada sencillo el sendero del retorno para Independiente, que comenzó el certamen de la "B" de la misma forma que había culminado su último en la "A": perdiendo, entre insultos y con un panorama oscuro. Todavía con Brindisi en el banco de suplentes, las primeras cuatro jornadas lo encontraron con dos empates y dos caídas, asentado en la zona de descenso a la Primera B Metropolitana y en plena caída libre. Inmediatamente, antes que la situación se tornara imposible de revertir, De Felippe fue designado como nuevo conductor del equipo. Al final de cuentas, sería la gran llave para subir.
Si bien el elegido debutó con un 0-0 ante Independiente Rivadavia, incluso oyendo los reclamos de una multitud impaciente y fuera de sí en el Libertadores de América, el bálsamo llegaría apenas unos días más tarde ante Huracán, en Parque Patricios, quebrando la sequía de victorias en el certamen. Con sacrificio, esfuerzo y sin sobrarle absolutamente nada, ese desahogo fue el punto de partida para encabezar la rebelión hacia el objetivo: desde ahí en adelante, una seguidilla de 15 encuentros (9 victorias, 5 igualdades y una derrota ante Almirante Brown) que lo dejaron, justo sobre la despedida del año anterior, en la posición de ascenso contra todos los pronósticos.
El desempeño colectivo en 2014, pese a la llegada de un ídolo como Federico Insúa, también estuvo distante de las pretensiones de simpatizantes, dirigentes y protagonistas. Amén de la satisfacción ante Brown de Adrogué en la cancha de Temperley, con pasajes de muy buen fútbol, los siguientes 19 compromisos del campeonato lo vieron festejar triunfos en apenas seis oportunidades ¿Cómo fue entonces que consiguió la meta trazada que le imponía su historia? La irregularidad generalizada del resto de los participantes, la asimilación de la presión con suficiencia en juegos determinantes (San Martín de San Juan, Ferro, Douglas Haig y Defensa) y una personalidad que apareció más tarde que temprano, pero necesaria para adueñarse del preciado último escalón del podio.
EL CAOS INSTITUCIONAL, PRINCIPAL ENEMIGO DE INDEPENDIENTE
¿Qué tienen en común los siguientes episodios? Un escándalo en la Asamblea con sillazos y la invasión de la barra, el mensaje mafioso con perros colgados en el predio de entrenamiento, la interna de los violentos que lideraron "Bebote" y "Loquillo", el interminable cruce dialéctico entre el jefe de la hinchada y el ex presidente Cantero, los recurrentes paros de empleados de la institución, amenazas de bomba en el establecimiento educativo del club, escasas cantidades de comida para los habitantes de la pensión, momentos de inseguridad en Villa Domínico, entredichos con el padre del "Kun" Agüero por los refuerzos y la imposibilidad de presenciar una práctica, la denuncia de violación sobre el joven Alexis Zárate, los encadenados en la sede social de Avenida Mitre, el incendio en los quinchos, los rumores de internas en el plantel, las peleas cuerpo a cuerpo entre los hinchas y algunos referentes del equipo, el acampe de un grupo de fanáticos en el domicilio de Cantero, la extensa novela por el acuerdo con la Oposición, la inhibición de Luciano Leguizamón sobre las Copas, los escraches varios en Avellaneda, la publicación de las cifras del contrato de Insúa, la factible quita de puntos por viejas deudas en el traspaso de Leonel Núñez y la renuncia de muchos miembros de la casi acéfala Comisión Directiva. Absolutamente todos ocurrieron en Independiente, en menos de un año y trabaron más de lo pensado la obtención del ascenso. Por eso, bien expresada la frase "el rival de Independiente fue Independiente".
LA RENUNCIA DE JAVIER CANTERO AL SILLÓN PRESIDENCIAL
El primer año y medio del candidato de "Independiente Místico" fue la debacle definitiva de un club a la deriva. Todo el apoyo que había conseguido en las urnas en diciembre de 2011, con el 60% de las elecciones a su favor ante un número récord de asistentes, se fue a la basura con el correr de los días. Comenzó como un héroe, terminó como el villano. Se debilitaron sus embates contra los violentos y la política futbolística siempre fue incorrecta. Las contrataciones no rindieron, se perdió patrimonio con otros futbolistas y nunca se ensambló una base confiable. Completamente dispuesto y convencido a seguir los pasos de Daniel Passarella en River, que sufrió el descenso y llegó hasta el último día de su gestión, su círculo de confianza le fue restando respaldo y las renuncias se fueron acumulando bajo su brazo. Acorralado por los incumplimientos económicos con jugadores, empleados y demás obligaciones, hasta De Felippe lo puso contra la pared en una conferencia de prensa ("Hay que ponerse los pantalones largos porque esto es un quilombo"). Mediante un acuerdo de la Oposición que contó con la venia de la AFA, no quedó más alternativa que dar un paso al costado y marcharse con la cabeza mirando hacia el suelo. Hasta su familia le exigía que se fuera.
EL ASCENSO, PIEDRA FUNDAMENTAL PARA RECUPERAR LA SONRISA
Acostumbrado a las grandes epopeyas y hazañas futbolísticas, Independiente debe permitirse festejar y delirar con la concreción de una meta singular. Las antiguas generaciones no hubieran imaginado jamás un momento como el actual, pero el "Rojo" cosechó un éxito para erguirse de pie y recuperó una plaza que le pertenece y nunca debió haber abandonado. Pese a las dificultades de la extensa temporada, el clima hostil y diversos momentos que debió transitar, sacó la "chapa" que lo caracteriza en las difíciles. Aunque no haya sido en los planos locales más altos o en los internacionales que generaron la más intensa envidia del resto, Independiente saldó un castigo que todavía duele y está de vuelta en su lugar de origen.
Miércoles, 11 de junio de 2014
