GRAVE Un abuelo fue a reclamar a la DPEC y un funcionario lo atacó a golpes Un lector de CorrientesHoy envió a la redacción del diario digital un relato en el cual comentaba las duras peripecias que padeció un hombre de 65 años quien se dirigió hacia las oficinas de la DPEC por un reclamo y fue atendido "a golpes" por un funcionario de la dependencia energética del Gobierno de la provincia. A continuación se transcribe el email completo que brinda detalles del triste suceso. 
Soy Nelson Damián Cabral (escritor) y hoy me entero de un terrible hecho ocurrido a mi vecino. El día viernes 10 de mayo de 2013 entre las 9:00hs y 10:00hs de la mañana el Sr Roberto Chamorro un abuelo tranquilo y apacible (de unos 65 años) se fue a la empresa DPEC (encargada del suministro eléctrico en la cuidad de Corrientes) para asentar una queja formal sobre un poste de luz que se había podrido y tumbado hace unos años asentándose sobre la pared de la fachada de su casa, esto a su vez daña la pared sur de su hogar cito en calle Marco Sastre 385.
Tras algunos años con quejas telefónicas para que repararan el poste el Sr Roberto atinó a ir personalmente al área de reclamos de la firma, una vez ingresado al recinto frente de la calle Maipú intento hacer el papeleo pertinente a la queja por medio del secretario del Sr Monzón (un encargado del lugar que no estaba presente).
En medio de esos trámites una persona que posteriormente rehusó identificarse se acercó al señor Roberto y le dijo al secretario que “no tomes la queja” y replicó en tono agresivo la misma frese varias veces.
En medio de esta confusión sin sentido el Sr. Roberto preguntó por qué la negatoria y pidió a este funcionario que se identifique para asentar una queja en derecho al consumidor por malos tratos hacia el cliente, fue allí que este funcionario en un brutal e inentendible acto contestó a los gritos e irrespetuosamente que no debían hacer nada por el problema y empezó a empujar al Sr Roberto sin que éste lo provocara, posteriormente el agredido me dice que era como si “el estuviera furioso conmigo por algún otro hecho, pero yo nunca lo había visto”, ésto también dejo sorprendido al secretario de allí en más se negó a hablar.
Después de empujarlo violentamente expulsándolo del recinto este funcionario le tiro un cabezazo que afortunadamente el Sr. Roberto logró esquivar aunque el funcionario intentó seguir golpeándolo con un más fuerza como si quisiera causarle daños graves, afortunadamente fue allí que unas señoritas e incluso una señora ya entrada en edad de unos 45 o 50 años intentaron calmar al funcionario de comportamiento perdidamente agresivo y lo llevaron de nuevo a una oficina.
El Sr. Roberto totalmente aturdido y sin provocar en modo alguno el suceso pregunto quién era aquel señor que lo agredió de esa forma tan irracional y se negaron a brindarle el nombre, no obstante era claro que este tenía un puesto importante en la administración de la empresa puesto a que pudo obligarle al secretario a no tomar el reclamo y por sobretodo tubo la contención de varios empleados que parecían conocerle, también está el detalle no menor de manejarse de una manera presuntuosa y mandante con respecto a los empleados.
Esto es a mi entender un hecho gravísimo donde un funcionario ataca a un ciudadano sin razón alguna, además agravado porque el sr Roberto es un abuelo con problemas cardiacos en tratamiento, el no haberle ocasionado lesiones graves o hasta la muerte será por sobre todo un hecho fortuito.
Me pregunto si este tipo ataco sin motivos a un abuelo ¿cómo me atacaría a mi si voy con algún reclamo por corte de luz o algo? ¿Acaso debemos llevar testigos o la policía cada vez que hacemos un reclamo?
Yo personalmente intente hablar con el interventor y sub-interventor de la DPEC los señores Vicente Pascual Parissi (INTERVENTOR) y Néstor Héctor Fernández (SUB-INTERVENTOR) para informarle de lo que ocurre en la empresa prestadora de un servicio público que dirigen ingenuamente pensado que ellos podrían no estar al tanto de estas cuestiones.
Lo cierto es que no pude pasar de la secretaria para comunicarme con alguno de ellos, aparentemente estos misteriosamente salen cuando uno los llaman.
La respuesta oficial de la secretaria fue que realice el reclamo en otra oficina de la DPEC para que reparen el poste como si fuera eso lo importante o el quid de la cuestión cuando lo importante era ni más ni menos informar a los directivos que posiblemente un tipo peligroso e inestable trabaja en una de sus oficinas para que procedieran en el asunto según estimen conveniente.
Algo aún más llamativo del hecho fue la reticencia de la comisaría 7ma a asentar una denuncia o acompañar al Sr. Roberto al recinto para detectar al agresor o por lómenos constatar la negatoria de estos señores a “entregar” el nombre del agresor.
Por supuesto el Sr Roberto desprovisto de cualquier fuerza publica fue “solo” al recinto para individualizar a su agresor pero como era de esperar estas personas se negaron a dar nombre alguno y el agresor no se hiso presente.
La policía de la comisaría 7ma esgrimió como motivos de no querer asentar la denuncia que el sr Roberto “no tenía lesiones” (caso que no es de su competencia puesto a que no son médicos o personal idóneo para tal información, ni conocen el estado de salud físico del agredido) además en un claro hecho de ignorancia confundieron daños (aunque si hubo daños materiales porque se rompió el anteojo del agredido) con agresión injustificada.
También en un hecho reprochable la policía dijo que como el hecho ya paso hace unos días ya no podía hacer mucho, cuando el Sr. Roberto el mismo día del incidente se presentó a la comisaria y no le dieron importancia al suceso ignorando y minimizando el terrible hecho.
Me pregunto ¿acaso si a una mujer le roban una cartera la policía no debería identificar al asaltante para individualizarlo y posteriormente aclarar el hecho, sus detalles y veracidades?
Entonces porque se niegan a identificar a agresor que podríamos presumir peligroso (considerando que ataco a un abuelo) y aún sigue en funciones.
Nelson Damian Cabral
ESCRITOR / DIRECTOR DE LA REVISTA LITERAR
(Corrientes Hoy)
Miércoles, 15 de mayo de 2013
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