Valeria Lynch se lució junto a las hermanitas Vera
Las Hermanas Vera junto a su invitada de lujo Valeria Lynch, lograron que el público baile al son del chamamé criollo. Por su parte, la lunes y los acordes chamameceros se prestaron para una nueva noche de implacables artistas, Diego Gutiérrez hizo vibrar su acordeón hasta doblarlo al final de su presentación. Entre los juegos de luces que envuelven al Anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola, las melodías que salían casi solas del acordeón del finalista de Talento Argentino Diego Gutiérrez, y la voz inconfundible de Valeria Lynch junto a las Hermanas Vera, hicieron que la sexta noche de la 23º Fiesta Nacional del Chamamé y 9º Fiesta del Chamamé del Mercosur engalane esta nueva luna correntina.
Pasadas las 23, el público comenzó a llenar lentamente el predio del Anfiteatro, había carteles por doquier que indicaban que esta fiesta es realmente la “Fiesta Mundial del Chamamé”, ya que personas de Israel, Chile, Uruguay, Brasil y otros rincones del mundo gritaban un sapucay tan sentido como el de los litoraleños.
Al llegar el Ballet Folklórico Nacional, los presentes se quedan atónitos como desde el primer día de su presentación el pasado martes 15, y del cual podrán seguir disfrutando hasta el viernes 18 que será el último día sobre este majestuoso escenario.
El músico misionero Gringo Barreto, conocido como "el ángel del chamamé", también hizo lo suyo arriba del escenario animando al público, el cual lo acompañó con palmas hasta el último tema. Y para sorpresa de los presentes, cantó junto a Cacho Espíndola el tema Estancia San Blas de Pedro Sánchez, lo que provocó un fuerte sapucay de todo el público.
Con el grito oficial de “Corrientes, capital mundial del chamamé” en la voz de “El flaco” Cosarinsky, dio pie al ingreso de el ganador de Talento Argentino Diego Gutiérrez, quien logró emocionar a todos con las melodías que salían de los distintos movimientos de su acordeón.
“Se armó una disputa porque uno quería escuchar “La Calandria”, otro “Kilómetro 11”, entonces yo les dije, con la mano derecha toco “La Calandria” y con la izquierda “Kilómetro 11”, y así fue que la historia relatada por Diego se hizo realidad cuando logró tocar los dos temas a la vez.
La piel de los presentes se erizaba, los acordes del acordeón lograron penetrar en los oídos y el cuerpo de los chamameceros, que todos salieron al ruedo con un sapucay.
Y como broche de oro se presentaron las Hermanas Vera junto a la presencia estelar de Valeria Lynch, que con su voz, alegría y baile cautivó a todos y los hizo levantarse de sus asientos para sentir el verdadero chamamé en la sangre.
Jueves, 17 de enero de 2013
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